Tu amor es muy grande
y que bien que lo repartes
porque somos una parte
de tu carne.
Corre por nuestras venas
tu misma sangre
y eso hace que tu amor
sea más grande.
Abuelo, abuela
porque sos padre y madre.
Tienes mil historias
que nos cuentas cada día.
En tu mirada se refleja
el paso de los años.
Tu piel curtida
por los duros inviernos.
Tu voz ya cansada
son lo que nos enseñan
las grandezas de la vida.
Nos das lo mejor,
por eso te digo hoy
que jamás te olvidaré,
y aunque la vida
te aparte de nuestro lado,
tendrás siempre en nosotros
un lugar muy sagrado.
Estarán en nuestros corazones
por el resto de la vida.
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